¿Por qué es peligroso el amianto?

La OMS clasificó el amianto como cancerígeno de tipo 1 en 1977. Asimismo, especificó que todas las variedades de amianto provocan cáncer en el ser humano. Estas son: actinolita, amosita, antofilita, crisotilo, crocidolita y tremolita.
¿Cuándo es peligroso el amianto?
La exposición al amianto causa distintas variedades de cáncer y asbestosis. Estas enfermedades se producen tras la exposición al asbestos. Esto es porque, el amianto desprende fibras que se fragmentan en otras más pequeñas, imperceptibles a simple vista. Estas fibras son inhaladas y, debido a su forma y tamaño, se quedan en las paredes de los pulmones. Es por lo que el amianto y los materiales que contienen este mineral, deben considerarse peligrosos.
Es cierto, que existe un nivel de peligrosidad dependiendo de ciertas características:
- El tipo de variedad de amianto que sea.
- La friabilidad del amianto.
- El estado del material que contiene amianto.
¿Qué tipos de amianto son los más peligrosos?
El amianto se divide en seis tipos. En España predominan tres de ellos: crisotilo, amosita y crocidolita. De estos, el más peligroso es la crocidolita, conocida comúnmente como amianto azul por su apariencia azul-verdosa.
Las fibras de la crocidolita son rectas, largas y finas. Fue empleada principalmente en la construcción de tuberías a presión o bajantes de comunidades. El uso del amianto azul fue prohibida en España en el año 1984 a través de la Orden de 31 de octubre de 1984 por la que aprobaba el Reglamento sobre Trabajos con Riesgo de Amianto.
Esto no quita que el resto de amiantos no sean peligrosos. Ya que, como expone la Organización Mundial de la Salud, todas las variedades de amianto provocan cáncer.
Amianto friable
Los materiales que contienen amianto se clasifican en friables y no friables. La friabilidad es la facilidad que presenta el material para romperse y desprender fibras.
En los materiales friables, el amianto se desprende con facilidad llegando a desmenuzarse al tocarlo con la mano.
Estado del material que contiene amianto
Es importante conocer el estado de la instalación que contiene amianto. Por ejemplo, una cubierta que se ha visto afectada por una lluvia de granizo es probable que desprenda fibras de asbestos.
Si el estado del material es bueno, la emisión de fibras al ambiente será prácticamente nula. En cambio, un material roto o deteriorado, liberará fibras de amianto llegando a ser perjudicial.